Indice
Las bombas de Hiroshima y Nagasaki siguen explotando y la víctima eres tu.
- La falsificación de la historia (1ª parte):
Las bombas no se tiraron sobre objetivos militares.
Las bombas no evitaron la muerte de soldados aliados.
Las bombas no pusieron fin a la II Guerra mundial, ni se tiraron para derrotar
a Japón.
- La falsificación de la ciencia (2ª
parte).
El fraude de los estudios médicos sobre los supervivientes sirvió de base para
establecer los niveles "admisibles" de radiactividad que sigue
contaminándonos.
Las bombas de Hiroshima y Nagasaki siguen explotando y la víctima eres tu.
En 1945, la primera bomba atómica se lanza sobre Hiroshima el 6 de Agosto y
otra sobre Nagasaki el 9 de Agosto . Este año numerosas conferencias
internacionales conmemoran este trágico suceso en su 60 aniversario, ver al
final del artículo los contactos con algunas de ellas.
No se trata en este año solo de una simple conmemoración histórica. Es
destacable el momento crítico respecto a una próxima guerra nuclear en el que
nos encontramos por varios motivos entre los cuales hay que destacar:
- la salida unilateral de EEUU del tratado ABM que suponía una cierta
prevención del riesgo de guerra atómica.
- el fracaso de la conferencia de revisión del TNP, el tratado de no
proliferación nuclear, celebrada en Nueva York en mayo 2005.
- la utilización creciente de armas radiactivas en las 3 últimas guerras que ha
sido justamente denominado el caballo de Troya de la próxima guerra nuclear.
- el amenazador y creciente programa estadounidense de nuevas armas nucleares y
su negativa a respetar los tratados internacionales que hacen cada vez mas
inminente su uso.
I. LA FALSIFICACION DE LA HISTORIA
Las bombas no se tiraron sobre
objetivos militares.
Las bombas no evitaron la muerte de soldados aliados.
Las bombas no pusieron fin a la II Guerra mundial, ni se tiraron para derrotar
a Japón.
"La omisión, es la mentira más
poderosa".
George Orwell
La omisión de hechos fundamentales es una parte de la falsificación sistemática
de la historia, que es un elemento esencial de la propaganda del sistema.
La falsificación de la historia de la
segunda guerra mundial por los historiadores occidentales(1), llega a su cumbre
con la versión oficial de los bombardeos atómicos de Japón (2).
Así que engañados por una enseñanza
falsificada, reforzada regularmente por reportajes en los medios de
desinformación, todo el mundo cree que las bombas arrojadas sobre objetivos
militares de Hiroshima y Nagasaki pusieron fin a la Segunda Guerra Mundial,
evitando más víctimas civiles y militares.
Harry Truman, presidente de los Estados Unidos, declaró entusiasmado
inmediatamente al recibir la noticia de la aniquilación de Hiroshima: "Éste es el suceso más grandioso de la historia".
Luego en su primer discurso referente al hecho mentiría sin verguenza:
"El mundo se enterará que se soltó la primera bomba atómica del mundo
sobre una base militar en Hiroshima."
y no olvidó añadir otra justificación humanitaria, adelantándose a las críticas
venideras.
"Esto se hizo para evitar hasta donde fuera posible la muerte de
civiles." (3)
"Las bombas evitaron la muerte medio millón de soldados
norteamericanos." Truman.
"Las bombas salvaron a un millón doscientos mil aliados".
Winston Churchill. (4)
Os invito a repasar la versión oficial críticamente:
1. LAS BOMBAS SE TIRARON SOBRE OBJETIVOS MILITARES.
Mentira.
Si Hiroshima albergaba "una importante base militar" como dijo el
presidente Rooswelt, y como repite esta semana la revista española la Aventura
de la historia en su dossier central que no tiene ni una sola referencia bibliográfica
: "Hiroshima era un importante enclave militar, albergaba depósitos de
armamento y una planta de investigación del ultrasecreto caza a reacción
japonés" (5)
¿ Cómo es que sus habitantes declararon que no se asustaron cuando oyeron el
ruido del enola gay que llegaba con el regalito, ni de los otros 2 aviones
"ya que los aviones siempre pasaban de largo"?.
¿ Por qué no se había bombardeado antes Hiroshima, cuando la fuerza aérea
norteamericana se había hartado de bombardear todos los objetivos militares y
las ciudades japonesas.?
En junio de 1945, el General Curtis LeMay, a cargo de los ataques aéreos a
Japón, se quejaba de que después de meses de los bombardeos con napalm no había
ya nada en las ciudades japonesas más que blancos de chatarra y basura. En
julio, los aviones de Estados Unidos podían volar sobre Japón sin encontrar
resistencia y bombardear tanto como quisieron ya que Japón no podía defenderse.
(6-7-8).
De hecho los bombardeos de alfombra habían arrasado no solo las 5 ciudades más
importantes, si no también otras 67 ciudades ( 23 ciudades de entre 100.000 y
400.000 habitantes y otras 41 ciudades de unos 100.000 habitantes. )
destruyendo casi toda la capacidad industrial japonesa como la propia revista
La aventura de la Historia reconoce.
Incluso se había bombardeado antes la ciudad de Iwakuni situada solamente a 8
km de Hiroshima como menciona la revista Le Monde Diplomatique de este mes sin
incluir lamentablemente ni un solo comentario crítico sobre la versión oficial
de los hechos (9).
La orden número 13 dada el 2 de agosto por mandos estadounidenses decía:
"Fecha del ataque: 6 de agosto. Objetivo del ataque: la parte histórica y
la zona industrial de la ciudad de Hiroshima. Segundo objetivo de reserva: los
arsenales y la parte céntrica de la ciudad de Kokura. Tercer objetivo de
reserva: la parte céntrica de la ciudad de Nagasaki". (10)
Leyendo las ingenuas declaraciones de los pilotos norteamericanos que tiraron
las bombas se puede encontrar que las dianas eran los propios centros de las
ciudades y que en el caso de Nagasaki las ordenes ni siquiera se molestaban en
mencionar otro objetivo.
Nagasaki no era el segundo objetivo pero una espesa capada nubes cubría el que
sí lo era: Kokura. Incluso en Nagasaki según declaraciones del copiloto
estuvieron a punto de no poder tirar la bomba hasta que encontraron un agujero
en las nubes. Por eso la bomba afortunadamente cayó tras las colinas que
dividen a la ciudad y no en el área más poblada siendo el número de víctimas
inmediatas mucho menor que en Hiroshima (11)
Bombardear ciudades no era nada nuevo. Desde antes de la segunda guerra mundial
el bombardeo de civiles había sido puesto en práctica por los británicos.
Es lo que documenta Yuri Tanaka profesor investigador en el Instituto por la Paz
de Hiroshima y coordinador de la Revista Japan Focus entre cuyos libros se
encuentra "Hidden Horrors. Japanese War Crimes in World War II". (12)
En octubre de 1922 ocho escuadrones de la RAF iniciaron bombardeos a gran
escala sobre Iraq con diversos tipos de bombas, incluyendo bombas incendiarias,
bombas de acción retardada, y petróleo sobre viviendas civiles. Según ellos los
bombardeos indiscriminados "demostraban ser notablemente efectivos,
extremadamente económicos e indudablemente humanitarios a la larga"… y
prosiguieron hasta 1932 (12)
El general Hugh Trenchard, después de los bombardeos civiles en Irak, dirigió
la Independent Force (el cuerpo británico de bombarderos en la II guerra
mundial ) y aplicó la misma estrategia que ahora pasó a denominarse púdicamente
"bombardeos estratégicos".
Trenchard aseguraba que: "es evidente que el efecto moral de los
bombardeos supera a sus efectos materiales en una proporción de 20 a 1, y que
por tanto era preciso crear el mayor efecto moral posible". Por lo tanto la
mejor manera de derrotar al enemigo era llevar a cabo "bombardeos
estratégicos" contra viviendas de civiles, especialmente de obreros
industriales.
Los norteamericanos compartieron esta táctica confiando en que la campaña de
bombardeos conjuntos anglo-estadounidenses sobre civiles iba a destruir la
moral alemana. Y así se hizo por ejemplo el 13 y el 15 de febrero, la ciudad de
Dresde sufrió un bombardeo durante 14 horas con bombas incendiarias. Arrasaron
la ciudad, donde no había instalación militar alguna, y mataron 70.000 y
135.000 personas. (12)
Al final de la guerra, 131 pueblos y ciudades alemanes habían sido bombardeados
y aproximadamente 600.000 civiles alemanes habían muerto durante
"bombardeos estratégicos" llevados a cabo principalmente por fuerzas
británicas y estadounidenses (12).
A pesar de estas evidencias el historiador David Kennedy tiene el cinismo de
escribir esta semana mismo en la "prestigiosa" revista Time " En
Europa los aviones U.S. B-17 y B-24 de bombardeo hicieron un considerable
esfuerzo por restringir sus ataques a los objetivos de alto valor económico y
militar." (13 )
Este energúmeno enseña Historia en la Universidad de Stanford para desgracia de
sus alumnos y por si fuera poco amenaza con un próximo libro acerca del
carácter nacional Americano.
Luego los norteamericanos continuaron la misma estrategia en el Pacífico.
Más de cien ciudades japonesas fueron destruidas mediante bombas incendiarias y
dos más mediante bombardeos nucleares, causando un millón de víctimas,
incluyendo más de medio millón de muertes, sobre todo de civiles (12) .
Solo el bombardeo de Tokio en 9 de marzo 1945 con bombas de fósforo y con 8.250
bombas de 250 kgs. que a 150 metros antes de tocar el suelo se fragmentaban
cada una en 50 bombas de napalm, asesinó a 120.000 personas, hiriendo a más de
40.000 ( 14 ).
Los bombardeos de alfombra habían arrasado no solo las 5 ciudades más
importantes, si no también otras 67 ciudades ( 23 ciudades de entre 100.000 y
400.000 habitantes y otras 41 ciudades de unos 100.000 habitantes. )
destruyendo las viviendas de 21 millones de personas (14 ).
Es preciso resaltar que la mayoría de las víctimas de los "bombardeos
estratégicos" son necesariamente civiles, en especial ancianos, mujeres y
niños por la sencilla razón de que los hombres jóvenes se encontraban en el
frente.
Matar civiles deliberadamente con "bombardeos estratégicos" o por
otros medios son crímenes de guerra según los principios de las leyes
internacionales establecidos en Nuremberg y en Ginebra.
Son actos de terrorismo.
Por último, Tanaka recuerda que "jamás se ha terminado guerra alguna tan
sólo bombardeando indiscriminadamente y matando a civiles en masa. Más bien hay
numerosas evidencias de que semejantes estrategias han solido fortalecer la
resistencia" (12).
Esta estrategia siguió durante las guerras de Corea donde se destruyeron la
mayoría de las ciudades y pueblos con masivos bombardeos de napalm (15) y de
Vietnam donde se llegó a envenenar las cosechas con dioxinas mediante el agente
naranja como hemos documentado anteriormente (16 ).
En las últimas guerras las víctimas civiles y la destrucción de objetivos no
militares han pasado a denominarse "daños colaterales". Los
"bombardeos de precisión" con armas radiactivas en guerras como las
de Afganistán, Kosovo e Iraq extienden las víctimas no solo a las poblaciones
civiles actuales si no también a sus futuras generaciones.
Volviendo a Hiroshima y Nagasaki. Las bombas no se tiraron para evitar más
víctimas civiles de la guerra. Por el contrario las víctimas civiles habían
sido un objetivo de los bombardeos y lo siguen siendo.
2. LAS BOMBAS EVITARON LA MUERTE DE
SOLDADOS ALIADOS.
Falso.
Las estimaciones de víctimas americanas que hipotéticamente se evitarían al
tirar las bombas atómicas han sufrido un ajetreo considerable
El 18 de junio en una reunión de los jefes militares americanos se concluye que
las pérdidas estimadas, tras un desembarco en Japón, no superarían a los 50.000
hombres. (17)
Según el estado mayor USA eran de entre 20.000 y 46.000 en junio-julio de 1945.
Truman hablaba usualmente de 250.000.
Pero esa cifra fue engordando a medida que pasaba el tiempo en 1955 el mismo
Truman ya daba una cifra de medio millón de Norteamericanos salvados. Winston
Churchill se pasó todavía más y habló de que las bombas habían salvado a millón
y medio de aliados.(18-19)
Pierre Pierart concluye al respecto:
"Contrariamente a lo que se
dice en los manuales de historia y en los
medios, Hiroshima y Nagasaki no habrían ahorrado más que 25 a 50.000
muertos de soldados americanos según los informes más serios
de diferentes consejeros militares norteamericanos. Hay que recordar
que la
terrible batalla de Okinawa, del 1º de abril al 26 de junio de 1945,
provocó
muerte de 12.500 soldados americanos y 37.000 heridos. "(20)
Nótese que incluso la predicción más optimista parte de la base de que hubiese
un desembarco de las tropas USA. Pero incluso la necesidad del desembarco fue
puesta en cuestión un año después por el informe The United States Strategic
Bombing Survey que afirma que: "antes del 1 de noviembre de 1945 Japón se
habría entregado incluso incluso si no se hubiese planteado ninguna
invasión".(21).
Es preciso pues concluir que las bombas atómicas eran además mágicas ya que
iban salvando más y más vidas humanas a medida que pasaba el tiempo. Así que no
solo no debemos denunciar a los responsables de haberlas tirado como asesinos,
si no que además debemos estarles eternamente agradecidos por su maravillosa
labor humanitaria.
3. LAS BOMBAS PUSIERON FIN A LA II
GUERRA MUNDIAL.
Mentira.
El proyecto de fabricar la bomba atómica se inició en mayo de 1942 bajo la
dirección de Vannevar Bush, presidente del Carnegie Institute, y del general
Leslie Groves, jefe del cuerpo de ingenieros del ejército bajo el nombre de
Manhattan. (20)
El programa Manhattan tenía inicialmente un objetivo preventivo: la fabricación
de 3 o 4 bombas atómicas que utilizasen la reacción en cadena de la fisión del
uranio 235 y del plutonio . Esta reacción en cadena debería liberar cantidades
enormes de energía en un tiempo muy breve. En principio, oficialmente se
trataba de disuadir a los Alemanes de su proyecto secreto de utilizar una bomba
atómica que nunca terminaron de fabricar.
Numerosos datos históricos demuestran (incluso del gobierno y de altos mandos
del ejercito Norteamericanos) esa afirmación no se sostiene.
William Blum demuestra muy documentadamente que la capacidad militar de Japón
había sido totalmente destruida y el gobierno japonés había enviado comunicados
y personas para negociar la paz con los Estados Unidos; negociadores que
Washington ignoró completamente (21).
Históricamente los archivos nacionales en Washington contienen documentos del
gobierno de ESTADOS UNIDOS que contienen pruebas de la intención japonesa de
acordar la paz desde una fecha tan temprana como 1943. (22)
Un cable del 5 de mayo de 1945, enviado a Berlín por el embajador alemán en
Tokio, decía que oficiales de la marina japonesa reconocían que la situación
claramente era desesperada y que las fuerzas armadas japonesas aceptarían la
capitulación incluso si los términos eran duros. El cable fue interceptado y
descifrado por los Estados Unidos. (23)
Ese mes, el secretario de la guerra L. Stimson rechazó tres recomendaciones de
alto nivel dentro de la administración para activar negociaciones de paz. Las
ofertas proponían informar a Japón que los Estados Unidos estaban dispuestos a
considerar el mantenimiento del sistema imperial, (como de hecho así se hizo )
y no insistir sobre la rendición incondicional. (24)
Alemania había sido derrotada meses antes fundamentalmente por el ejército
soviético (25). La rendición definitiva se produjo el 9 de mayo 1945.
El Vice Presidente Truman nunca fue informado de la existencia de la bomba al
contrario que el ministro de la guerra Stimson .
Sólo cuando murió el presidente Roosevelt el 12 de Abril de 1945 el Secretario
de estado James Byrnes le puso al corriente del proyecto (21).
El 16 de abril. El general Arnold, jefe de las Fuerzas Aereas y el general
Groves, jefe del proyecto Manhattan escojen las 4 ciudades diana para el futuro
bombardeo atómico : Hiroshima, Niigata, Kokura et Nagasaki. (26)
El 18 de abril. Henry L. Stimson, ministro de la guerra presenta la lista a
Truman.(26)
El 26 abril. Truman es informado de que el proyecto Manhattan va retrasado. El
uranio 235 no estará listo antes del 1º de agosto. (26)
El 21 de mayo. Truman confía a Davies que ha retardado la apertura de la
conferencia de Potsdam hasta Julio afín de poder utilizar la bomba en el plano
diplomático, pues quería estar seguro de disponer de su bomba atómica en la
reunión. (27)
De hecho la conferencia de Potsdam en la que reunieron los Aliados (incluyendo
a los Rusos) se realizará a partir del 17 julio hasta el 2 de Agosto.
El 31 de mayo se reunió la comisión interina encargada según explicó el
secretario de guerra Stimson de decidir si se tiraría la bomba y en que
condiciones. Estaba constituida por militares como los generales Marshal y
Groves, responsables políticos, científicos y multinacionales industriales como
Dupnt, Westinghouse, Union Carbide, Teenese Eastman, etc. (28)
Japón ya había manifestado seriamente su intención de rendirse antes de que se
tirasen las bombas.
El 21 de junio de 1945, al día siguiente de la caída de Okinawa, el emperador
japonés rechaza las posturas extremistas que los militares han manifestado
opuestas a la rendición. (29)
El 6 de junio el ministro de la guerra Henry L. Stimson dijo a presidente
Truman que "temía que antes de que las bombas atómicas estuvieran listas
Japón se rindiese impidiendo demostrar su fuerza." (30)
En julio Togo, ministro de Asuntos exteriores de Japón, pedirá al embajador
soviético, J. Malik, que facilite las mediación entre el Japón y los
Estados-Unidos. Esta acción diplomática no tendrá ningún efecto.(27)
En julio, antes de los líderes de los Estados Unidos , Gran Bretaña, y la
Unión Soviética se reunieran en Potsdam, el gobierno japonés envió varios
mensajes de radio a su embajador, Naotake Sato, en Moscú, pidiendo que
"solicitase la ayuda soviética para mediar en establecer la paz. Su
majestad está extremadamente impaciente por terminar la guerra cuanto
antes". (31)
A pesar de que no les informó oficialmente los rusos conocían el proyecto al
menos desde junio ya que Klaus Fuchs proporcionó una descripción detallada de
la bomba de plutonio a los Soviéticos (27).
6. junio. Stimson informa al presidente Truman que el proyecto Manhattan debe
seguir siendo secreto. Dos semanas más tarde, el comité aconseja al presidente
anunciar la bomba discretamente a Estalin. (17)
11 junio. Informe de James Franck sobre los peligros de una carrera de
armamentos atómicos. (17)
21 junio. El comité dirigido por Stimson afirma que la bomba debe ser utilizada
a la primera ocasión, sin advertencia previa, sobre una ciudad con una fábrica
de armamento. (17)
El problema como hemos visto antes es que ya no quedaban ciudades con
importantes fábricas de armamento… Daba igual, las ciudades ya habían sido
escogidas aunque no las tuvieran por los generales norteamericanos.
30 junio. El comité responsable de la prueba de la primera bomba atómica
Trinity (Alamogordo) retrasa la fecha del ensayo atómico al 16 de julio (17).
4 julio. Churchill da su aprobación para el empleo de la bomba atómica (comité
político anglo-americano de Washington). (20)
7 julio. El emperador Hiro-Hito pedirá al gobierno soviético recibir al
príncipe Konoye en Moscú para negociar una rendición incondicional (21).
10 julio. Molotov declara al ministro chino de Asuntos Exteriores, T.V. Soong,
que la URSS podría declarar la guerra al Japón a finales de agosto.(20)
16 de julio. Primera explosión atómica experimental en Alamogordo, Nuevo Méjico
(Trinity) de la bomba de plutonio que era la más conflictiva.
17 julio Apertura de la Conferencia de Potsdam en el palacio Kronprinz que se
prolongará hasta el 2 de agosto.
18 julio Stalin informa personalmente a Truman que el ministro japonés de
Asuntos Exteriores Togo y el embajador en Moscú Sato piden el fin de la
guerra.(20)
21 julio. Truman recibe un informe detallado del general Groves sobre la
explosión de Alamogordo. Desde ese momento la actitud del presidente americano
con relación a los Soviéticos cambiará totalmente... Le presidente de los
Estados-Unidos, en el curso de una reunión aparte, anuncia a Estalin que tiene
un arma secreta revolucionaria. Estalin le invita a " utilizarla
bien".(20)
El présidente Truman endurece su posición y toma disposiciones para poner fin a
la conferencia desde el 24 de Julio.
El 24 de julio el grupo de los aviones B-29 está listo ya para el bombardeo
atómico. Truman y sus colaboradores Stimson, Marshall y Arnold fijan el
comienzo de las operaciones para el 3 de agosto. (20)
El 25 de julio, durante la reunión de Potsdam, Japón aseguró al Ministro de
Asuntos Exteriores ruso Molotov la sinceridad de nuestro deseo de terminar la
guerra y que entiendan que estamos intentando terminar las hostilidades
pidiendo términos muy razonables para asegurar y mantener nuestra existencia
nacional y el honor " Es decir el mantenimiento del emperador que de hecho
se respetó aunque fuese transformado en un títere de los EEUU (33-34).
Se ha dicho que los rusos no dieron curso a las reiteradas demandas de paz de
Japón, pero como señala Blum (21), habiendo descifrado años antes el código de
los mensajes japoneses, Washington no tenia que esperar a ser informado por los
soviéticos de estos correos para obtener la paz; lo sabía inmediatamente, y no
hizo nada. Además los anteriores datos demuestran sin duda alguna de que los
Estados Unidos tenían un conocimiento completo de que Japón intentaba terminar
la guerra.
El 26 julio Declaración de Gran-Bretaña, de los Estados-Unidos y de China
pidiendo la rendición incondicional del Japon. Amenaza de destrucción total del
Japón. Estalin no es consultado. (20)
El presidente Truman y su secretario de estado, James Byrnes, incluyeron la
condición de rendición incondicional al término de la declaración del 26 de
julio en Potsdam, sabiendo que era inaceptable y que de todas formas estaban
dispuestos a mantener un emperador títere que era lo único que Japón pedía.
Esto se hizo en contra de la opinión de los más altos mandos militares del
ejército Norteamericano. El General Douglas Mac Arthur, estaba convencido que
la retención del emperador era vital para una transición ordenada a la paz. El
Almirante William Leahy estaba de acuerdo. La negativa a conservar el emperador
daría lugar solamente a que el japonés se desesperase… un Japón casi derrotado
podía dejar de luchar si la entrega incondicional se retiraba como demanda
(35-36).
Pierre Pierart recalca que "se propuso una capitulación explícitamente
incondicional con el reconocimiento implícito del mantenimiento de la monarquía
imperial." (37)
Un detalle importante ya que los aliados sabían que formulada de este modo la
declaración no sería aceptada por Japón que era lo que se pretendía. Pero hacía
falta tener una excusa y ocultar el hecho de que la orden de lanzar las bombas
había sido dada antes de publicar el ultimátum.
Esta versión final de los términos de la rendición de Japón eran en cualquier
caso una payasada. El día antes de que fuera publicada, Harry Truman ya había
aprobado la orden para lanzar la bomba atómica. (38)
El 28 de julio el almirante Suzuki, en une conferencia de prensa, declara que
Japón no responderá al ultimátum (que había sido censurado por los militares)
(20).
El 3 de agosto los 3 aviones están listos para la misión de bombardeo y de
fotografía de la bomba (37).
El 5 de agosto Truman incita a Tchang Kaï Chek para que retrase las
negociaciones previas a la entrada en guerra de la URSS contra el Japón (37).
El 6 de agosto se tira la primera bomba atómica en el centro de la ciudad de
Hiroshima. Hemos descrito en detalle sus efectos en conmemoración del 59
aniversario (39).
Es muy importante resaltar que incluso desde el lado de los Estados Unidos
muchos funcionarios militares de alto grado cuestionaban la necesidad del uso
de la bomba atómica.
En Potsdam, el General Hap Arnold afirmó que el bombardeo convencional podría
terminar la guerra.
El Almirante Ernest King creyó que un bloqueo naval solamente la población
japonesa moriría de hambre y se sometería.
El General Dwight Eisenhower en una conversación con Stimson le dijo al
secretario de la guerra lo siguiente:
"Japón esta derrotado ya y tirar la bomba es totalmente
innecesario..." Pensé que nuestro país debe evitar la opinión impactante
del mundo por su uso de una arma innecesariamente como medida de ahorrar vidas
americanas. Era mi creencia que Japón, en ese mismo momento, buscaba una cierta
manera de rendirse salvando mínimamente su honor. Mi actitud perturbó al
secretario profundamente, refutando casi airadamente las razones que di."
En sus memorias, cuyo principal autor fue Bundy reconocidamente, el ex
secretario de defensa Henry L. Stimson reconoce que no se hizo ningún esfuerzo,
y no se consideraba hacer ninguno seriamente para que Japón se rindiese,
simplemente para utilizar la bomba.
No sabemos si Tolkien se inspiró en este Gollum enloquecido y borracho de poder
que llamaba amorosamente a la bomba atómica: "mi bomba, mi secreto",
en su diario citado en sus memorias.
Pero incluso al presidente Truman le aconsejaron sus generales del ejército,
Douglas Macarthur , que durante la guerra tenía a su mando las tropas aliadas
en el océano Pacífico, y el general Dwight Eisenhower, que luego fue
presidente, que no había ninguna necesidad militar de utilizar la bomba.
El general Mac Arthur advirtió a los EEUU que: "los japoneses están
agotados, que el emperador del Japón quiere firmar un armisticio y que el golpe
de gracia podría darse en un plazo de semanas mediante armas
convencionales" (42 ).
Truman reconoció en una reunión tres días antes de que la bomba fuera lanzada
sobre Hiroshima que "Japón estaba buscando la paz".
Pero a pesar de todo las bombas se tiraron. Y no solo una lo que evidentemente
habría bastado para el propósito oficialmente admitido de acabar la guerra,
sino que se tiraron dos. Además se hizo con un intervalo de 2 días solo lo que
dejaba poco tiempo para que se examinasen sus resultados. De hecho la segunda
bomba arrasó Nagasaki poco después de que los Japoneses se rindiesen.
A a las 11 de la mañana del de agosto 9, el primer ministro Kintaro Suzuki
declaró ante el gobierno de Japón: "bajo actuales circunstancias he
concluido que nuestro solamente alternativo debe aceptar la proclamación de
Potsdam y terminar la guerra." (43)
Las conclusiones del informe The United States Strategic Bombing Survey 11
meses después fueron las siguientes:
"Parece claro que sin los ataques atómicos. La supremacía en el aire
habría podido ejercer la suficiente presión de provocar la rendición
incondicional y evitar la necesidad de la invasión. De acuerdo con una
investigación detallada de todos los hechos, y apoyado por el testimonio de los
líderes japoneses que sobreviven implicados, es la opinión del examen que
ciertamente antes del 31 de diciembre de 1945, y en toda la probabilidad antes
del 1 de noviembre de 1945 Japón se habría entregado incluso si las bombas
atómicas no se hubieran tirado, incluso si Rusia no se hubiese incorporado la
guerra, e incluso si no se hubiese planteado ninguna invasión (44).
Más tarde en 1953 general Dwight Eisenhower reconoció ante la ONU que los
militares habían procedido a 42 explosiones nucleares desde Nagasaki hasta
diciembre de 1953 e intentó instituir el proyecto Condor para informar a la
población de los peligros de las explosiones nucleares militares. Proyecto que
nunca se aplicó (45).
El general Eisenhower, volvió a declarar en una entrevista de 1963 a la Revista
Newsweek que "el Japón estaba listo para rendirse y no era necesario
golpearlos con esa cosa tremenda" (46).
También años después el almirante Guillermo Leahy, indicó en sus memorias que
"el uso de esta arma bárbara en Hiroshima y Nagasaki no supuso ninguna ayuda
material en nuestra guerra contra Japón. Los japoneses estaban derrotados y
listos ya para rendirse.'' (46)
El general Mac Arthur reiteró en 1960 que "No había ninguna necesidad
militar de emplear bomba atómica en 1945". (21)
Y no penséis que Mac Arthur se había vuelto pacifista y antinuclear. Al final
de la guerra de Corea, cuando China entró en guerra, reclamaba desde el 9 de
diciembre de 1950 nada menos que 34 bombas atómicas para utilizarlas en
"un plan tan simple como decir buenos días". Este genial proyecto
consistía en " expandir desde el mar de Japón hasta el mar Amarillo un
cinturón de cobalto radiactivo" tirando algunas de las 450 bombas atómicas
que ya poseía EEUU en la época sobre una lista de objetivos que suministró en
diciembre de 1950 (15).
Incluso el propio Churchill reconocería después que: "Sería erróneo
suponer que el destino del Japón fuese determinado por la bomba
atómica"(21) .
La oposición de los científicos.
La oposición a la bomba en el mundo científico fue mucho más importante que en
el ámbito militar. Numerosos científicos escribieron al anterior presidente
Rooswelt para que detuviese el proyecto de utilizar la bomba atómica.
Ya en 1944 el físico danés y premio Nobel Niels Bhor escribió al presidente de
los Estados Unidos que en la época era Rooswelt y a Churchil advirtiéndoles del
peligro de las armas nucleares.
Bohr, insistió más tarde en la necesidad de informar a los Soviéticos sobre las
investigaciones realizadas en el marco del proyecto Manhattan. Churchill,
contrariamente a Roosevelt, se opuso vigorosamente a esta propuesta e incluso
quiso encarcelarlo. Bohr, que ya se había encontrado con los físicos Kapitsa y
Landau en la URSS, no fue autorizado a visitarlos (20).
En 1945 un grupo de 8 científicos atómicos encabezado por James Frank y entre
los que se encuentra Einstein escriben un informe (informe Frank ) advirtiendo
a Rooswelt del peligro.
Rooswelt al parecer no leyó este informe, ni la carta de Bhor .
El informe fue reenviado al recién electo presidente Truman el 11 de junio
firmado esta vez por 64 científicos. Tampoco tenemos evidencias de que los
leyera.
Uno de los principales opositores fue precisamente J. Robert Oppenheimer,
físico norteamericano de enorme prestigio y director científico del proyecto
Manhattan para la fabricación de la bomba atómica.
El 16 julio de 1945 la primera bomba de plutonio estalló en las Montañas Jemez,
al Norte de Nuevo México en Los Alamos
Oppenheimer, contemplándola estático citó un fragmento del texto hindú
milenario, el Bhagavad Gita:
" Soy la muerte, el destructor de mundos. "
Ken Bainbridge, director de las pruebas, añadio algo menos poético :
" Todos somos ahora unos hijos de puta."
Luego Oppenheimer inspeccionó el lugar de la explosión. Años después moriría de
cáncer de pulmón, uno de los cánceres favoritos del plutonio, aunque se
atribuirá a que fumaba en pipa.
Varios de los creadores de la bomba, inmediatamente después de haber
contemplado la monstruosa explosión, escribieron una petición para que no se
usase, pero como todas las demás protestas cayeron en saco roto.
Tras el crimen perpetrado por las bombas atómicas sobre los ciudadanos
Japoneses numerosos científicos se manifestaron contra la utilización de la
bomba y sus futuros desarrollos.
El 6 de Septiembre de 1945 James Byrnes representando a los Científicos
Atómicos presentó un Memorando crítico sobre las implicaciones políticas de la
energía atómica a James Byrnes, Secretario de Estado (47).
Oppenheimer considerado como el padre de la bomba, ya que dirigió su fabricación
declaró que la humanidad condenaría la fabricación de esta arma. Dos meses
después de Hiroshima, predijo: "La humanidad maldecirá los nombres de Los
Alamos e Hiroshima."
Oppenheimer, dimitió en octubre de 1945. En 1946 le dijo a Truman: "Sr.
presidente, tengo sangre en mis manos." Truman contestó: "fuera está
el lavabo." y le dijo a su ayudante que "no lo volviera a dejar
entrar." (48)
Tras la bomba hubo también una reacción de otros científicos que habían
trabajado en su preparación en los Alamos. Fundaron la federación de
científicos atómicos y publicaron un boletín mensual que se tituló
"minutos antes de media noche".
Einstein calificó la utilización de la bomba de "suicidio cósmico".
En 1949 el Dr. Oppenheimer entonces presidente del comité consultivo de la
Comisión de energía atómica obtuvo la condena por parte de todos sus miembros
acusándola de ser " un arma inmoral, costosa, e inutilmente
devastadora".
Openheimer, aunque aceptó la dirección de la Comisión de Energía Atómica (CEA)
de los EEUU, se opuso públicamente al nuevo plan para fabricar la bomba de
Hidrógeno mucho más devastadora .
Todo esto le valió la exclusión de su cargo y pasar a la lista negra durante la
caza de brujas del Macartismo.
En 1954, J. Edgar Hoover, director del FBI, redactó un informe para la Casa
Blanca apoyando la acusación de que Oppenheimer era un "agente de
espionaje". El comité de seguridad de la CEA, aunque sin que se demostrase
que fuera culpable lo separó de toda participación en los nuevos proyectos de
investigación. Finalmente cuatro años antes de morir fue rehabilitado.
"Truman sabía que estaba comenzando el proceso de aniquilación de las
especies", afirma Peter Kuznick, director del Nuclear Studies Institute de
la American University en Washington DC, EEUU. "No fue simplemente una
guerra contra el crimen, fue un crimen contra la humanidad." (7)
Como puede verse ni la opinión de los dirigentes militares ni la de los
científicos pudo impedir el crimen.
No nos engañemos no era culpa solo de Truman que acababa llegar a la
presidencia y de enterarse de la existencia del proyecto secreto de construirla
(Manhattan) a pesar de había sido el vicepresidente con Rooswelt.
Truman era solo un títere como lo son todos los presidentes.
Otras fuerzas más poderosas ya estaban en acción. Predominó la opinión y los
intereses de las multinacionales que habian impulsado el multimillonario
proyecto de creación de la bomba como Carnegie, Dupont, Westinghouse, Union
Carbide, Tenesee Eastman, General Electric, Boeing (que fabricaba los
bombarderos que las transportaron), etc. al que se sumarian otras como
Monsanto. (50 )
Esta es una buena prueba de que ya entonces el presidente de los Estados
Unidos, los políticos y el Pentágono no eran quienes decidían.
No es casual que Eisenhover en su discurso final como presidente de los EEUU
advirtiese del peligro para la democracia del creciente poder del lobby militar
- industrial.
Las decisiones se tomaron y se siguen tomando en otra parte.
PERO SI NO HACIA FALTA TIRAR LAS BOMBAS PARA ACABAR LA GUERRA. ¿CUAL ERA EL
OBJETIVO?.
No es difícil de comprender.
A mi juicio había tres motivos claros que justifican este comportamiento
criminal, innecesario, para ganar una guerra que ya estaba ganada.
I- Amenazar a Rusia, que entonces era un país "aliado" y al mundo
entero.
Anatoly Koshkin, Doctor en Historia, opina que el objetivo era frenar el avance
soviético en su artículo "No fue la bomba atómica lanzada sobre Japón lo
que hizo finalizar la Segunda Guerra Mundial"(10).
Truman dijo al respecto refiriéndose a los rusos:
"Si la bomba explota, en lo que confío, tendré, sin lugar a dudas, un
garrote para esos muchachos" (10).
El 28 de mayo de 1945, el representante personal del presidente de EEUU,
Hopkins, al encontrarse en Moscú informó a Washington de que Stalin les
prometió en persona a él y al embajador de EEUU, Harriman, lo siguiente:
"El Ejército soviético habrá desplegado plenamente sus unidades en las
posiciones de Manchuria hacia el 8 de agosto" (10). Manchuria estaba
ocupada por Japón en la época.
La URSS declaró la guerra a Japón el 8 de agosto y atacó el 10 de agosto, al
día siguiente de la tragedia de Nagasaki. No lo hizo en relación con los
bombardeos atómicos si no según lo acordado con sus aliados Británicos y
Estadounidenses en la conferencia de Yalta: entraría en la guerra tres meses
después de la capitulación de Alemania.
No es solo la opinión de los historiadores rusos, muchos historiadores,
científicos y militares occidentales han dicho lo mismo.
El científico inglés Blackett por ejemplo afirmó de que los bombardeos atómicos
"en el último lugar eran un acto apuntado contra Rusia".(10)
Según el científico nuclear del proyecto Manhattan Leo Szilard, el secretario
de estado Byrnes había dicho que la ventaja más grande de la bomba no era su
efecto sobre Japón sino su energía de hacer que Rusia fuera más manejable en
Europa. (51)
Szilard contó a sus biógrafos cómo el secretario del estado de Truman, James
Byrnes, dijo le antes del ataque de Hiroshima que `` Rusia sería más manejable
si quedase impresionada por el ejército americano. Una demostración de la bomba
puede impresionar Rusia ' '(46)
Después de Nagasaki, Stimson secretario de defensa escribió: "en el
departamento del estado se desarrolló un tendencia a pensar en la bomba como
arma diplomática."
Por si no estuviese suficientemente claro el General Leslie Groves que fue nada
menos que el director del proyecto Manhattan desde su comienzo, testificó en
1954 : "nunca a partir del momento en que tomé a mi cargo este proyecto,
me hacía ilusiones, Rusia era nuestro enemigo, y el proyecto fue conducido
sobre esa base." (53)
Churchill, que conocía el proyecto antes de Truman, había aplaudido y había
entendido su uso, dijo : "Ahora tenemos algo en nuestras manos que
reenderezará el equilibrio con los rusos. " (54)
Hace solo unos días en la revista Británica New Scientist dos historiadores han
divulgado algunas evidencias que confirman que la decisión de los E.E.U.U. de
tirar bombas atómicas en Hiroshima y Nagasaki fue empezar la guerra fría contra
la unión soviética, más bien que terminar la segunda guerra mundial y que no
era necesario para ello utilizarlas como hemos demostrado a lo largo de este
trabajo.
Selden, un historiador de la universidad de Cornell en York nueva, con Peter
Kuznick, director de los estudios nucleares que el instituto en la universidad
americana en Washington, estudiaron los archivos diplomáticos de los E.E.U.U.,
de Japón y de la URSS. Encontraron que "tres días antes de Hiroshima,
Truman admitío en una reunión que "Japón buscaba paz". Sus generales
mayores y consejeros políticos le dijeron que no había necesidad de utilizar la
bomba. Pero las bombas se tiraron de todos modos. El impresionar a Rusia era
más importante que terminar la guerra" (55)
II - Había que rentabilizar el proyecto
Manhatan.
Era preciso rentabilizar un proyecto que había costado un ojo de la cara. En el
curso de seis años, entre 1939 y 1945, se gastaron más de 2 mil millones de
dólares en el Proyecto Manhattan que movilizó a 150.000 personas.
No había explicación militar para el uso de la bomba, según el Almirante
norteamericano Leahy, la decisión era claramente política, debido a las enormes
sumas de dinero que se habían gastado ya en el proyecto. (56)